Doña Juana Rodríguez Estévez, de 75 años, después de ser trasladada a la sección de Rayos X fue llevada al quirófano para limpiarle la piel quemada. SAN PEDRO SULA.- Una anciana de 75 años que permanecía encamada por la artritis, resultó con quemaduras en el tórax, brazo derecho y extremidades inferiores cuando un cerillo que utilizó para encender un cigarro hizo que la cobija con que se arropaba tomara fuego.
La señora reside sola en una vivienda de Baracoa, pero en el mismo solar, en otra casa, vive un hijo con su mujer y sus vástagos. Fue identificada por una nieta como Juana Rodríguez Estévez.
Según la pariente, a eso de las 12:00 del mediodía de ayer escuchó los gritos que su abuela emitía cuando el fuego la abrasaba. Al entrar a la vivienda vieron que la cobija con la que se arropaba estaba en llamas, por lo que procedieron con una vecina a sofocarlas.
Al rescatarla observaron que la anciana había sufrido quemaduras en el tórax, brazo derecho, extremidades inferiores y la parte izquierda del rostro.
De inmediato fue trasladada al hospital Mario Rivas, en donde el médico que la atendió manifestó que las quemaduras son de tercer grado. Después de enviarla a Rayos X fue trasladada al quirófano para limpiarle la piel quemada e internarla en la sala de quemados.
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